Grandes empresas forestales finlandesas como UPM están cerrando fábricas debido a una huelga en el sector del transporte. UPM anunció la suspensión completa de la producción de papel y celulosa en al menos cuatro de sus fábricas en el país, lo que afectará a cientos de trabajadores.

Según Petri Vanhala, presidente del sindicato del papel, aunque los trabajadores no están en huelga, se ha suspendido el pago de salarios. La situación ha generado incertidumbre sobre el número exacto de afectados, pero en una sola fábrica trabajan varios centenares de personas.

Vanhal destacó que UPM ha decidido no seguir el criterio anterior de pagar salarios durante siete días cuando una fábrica se detiene por un conflicto laboral. El sindicato no descarta llevar el caso a los tribunales para evaluar si el procedimiento de la empresa fue correcto.

El director de mercado laboral de UPM, Jyrki Hollmén, afirmó que el empresario no está obligado a pagar salarios a los empleados que se quedan sin trabajo debido a huelgas.